¿Cómo recuperar tu cabello después de las vacaciones?

Volvés a la rutina y necesitás recuperarte del sol, la arena, la sal y reacondicionarte. Aquí repasaremos los mejores consejos.

Terminaron las vacaciones y posiblemente notes tu pelo distinto, ¿no es cierto? Quizás lo veas opaco, también quebradizo, seco y con las puntas dañadas. Esto se debe a que ha estado sobreexpuesto a condiciones a las cuales no está acostumbrado: rayos solares, altas temperaturas, arena, cloro y sales. Toda esta combinación hace que lo notes más dañado.

¿Pero qué es lo que sucede?

Al estar expuesto a estas condiciones, tu pelo pierde la cutícula, que es lo que le da movimiento, tensión y grosor. Al fin de cuentas, le da vitalidad. Además, lo más probable es que durante las vacaciones le prestes menos atención a su cuidado diario, como así al de tus uñas o al de tu piel. Hay una buena noticia: no es imposible recuperar su plena salud, pero te demandará atención y minuciosidad para realizar una rutina reparadora.

Primer paso: Reparar y desintoxicar

Si notas las puntas demasiado deterioradas, es lo que se llama efecto cremallera: aparecen abiertas, florecidas y, efectivamente pueden derivar en un daño aún mayor. Lo mejor para evitar que esto suceda es cortarlas, para reparar el daño y evitar que avance. Hazlo en tu peluquería de confianza y así verás como comienza a sanar.

Para la desintoxicación, debes tener mucha precisión: usa un shampoo purificante. Esto ayudará a eliminar todos los residuos externos e incluso las células muertas. No olvides estimular el cuero cabelludo con masajes. Y luego del shampoo usa siempre un acondicionador, recordando utilizarlo en la parte media y las puntas. Si aplicas el acondicionador en las raíces, puedes provocar o aumentar la grasa capilar causando caspa.

Al menos una vez a la semana, aplica una mascarilla capilar y déjala actuar durante una hora. Esto ayudará a hidratar tu cabello, además de recuperar su brillo y su suavidad. Cúbrela con papel aluminio para mantener el calor o aplica un poco de calor extra con el secador de pelo. Al retirarte el papel, realiza un masaje con la mascarilla puesta para activar la circulación y devolverle su elasticidad.

Segundo paso: cuidado y mantenimiento

Tras las vacaciones, aún contamos con algunos días de buen tiempo. Por eso te recomendamos evitar cuanto puedas el secador eléctrico, salvo cuándo lo utilices para aplicarte una mascarilla capilar. Lo mismo para la planchita, a menos que sea extremadamente necesario. De hacerlo, ten mucho cuidado con la temperatura aplicada. Recuerda que aún está recuperándose y ahora debemos preservarlo.

Es un buen momento para incorporar aceites capilares. Son buenas opciones los de oliva, los de coco o los de almendras. Estos ayudarán a la hidratación y combatirán el frizz, pero también evitarán la resequedad de tu cuero cabelludo.

Usa peines de cerdas anchas para desenredar. Evita los peinados a raya y escoge peinados recogidos, que además evitarán que el viento pueda romper la cutícula. La ponytail, o cola de caballo, es una muy buena opción y será tendencia durante el 2020.

Por último, usa sombreros y gorros. Hay muchísimas variedades y no solamente tienen que ver con las tendencias o con nuestro look, sino que además te protegen de los rayos ultravioleta. Y no dudes en recurrir a suplementos con vitaminas, aminoácidos y minerales hechos específicamente para mejorar la nutrición de tu pelo.

Como decimos, este tipo de rutinas merecen constancia, pero así recuperarás la mejor versión de cada uno de los peinados que elijas y notarás que tu pelo está mucho más saludable ¡Manos a la obra!

 

 

Créditos Imagen: Maria Orlova

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